Según la edición 2021 de las Perspectivas Económicas de África, publicadas por el Banco Africano de Desarrollo (BAfD) bajo el título «De la resolución de la deuda al crecimiento: una hoja de ruta para África», Argelia podría volver a crecer en 2021. «En este escenario, se produciría un importante repunte del crecimiento real, estimado en un 3,4% del PIB este año».
La vuelta a un crecimiento elevado permitiría, según el BAfD, «una reducción significativa del déficit fiscal global hasta el 10,3% del PIB en 2021 y el 8,7% en 2022». La tendencia sería similar para el déficit por cuenta corriente, que se reduciría, según el BAfD, al 13,8% en 2021 y al 11,1% en 2022.
Sin embargo, el Banco advierte que «Argelia debe profundizar en las medidas de ampliación de la base fiscal que conlleva la ley de finanzas de 2021, y poner en marcha un programa de diversificación de su economía, con el fin de limitar la deuda pública interna». De lo contrario, «la fuerte dependencia de la economía argelina de los hidrocarburos seguirá obstaculizando sus perspectivas de desarrollo a medio plazo», afirma el BAfD.
En el apartado «Cuestiones y opciones de financiación», el BAfD señala que «en la medida en que las autoridades han decidido no endeudarse externamente, la deuda pública de Argelia es principalmente interna y ha aumentado significativamente desde 2016 para financiar el déficit derivado del aumento del gasto y el descenso de los precios de los hidrocarburos». A finales de 2019, mientras que la deuda pública externa representaba menos del 1% del PIB, la deuda interna, incluidas las garantías, superaba ligeramente el 46% del PIB y podría aumentar en los próximos años.»
En cuanto a la observación, el Banco señala que la pandemia de Covid-19 ha tenido un impacto significativo en la economía argelina en 2020. Recuerda que, además de sus consecuencias sanitarias adversas, «la pandemia ha agravado otros factores negativos, como la caída del precio del petróleo, que ha sumido a la economía argelina en la recesión». El PIB real cayó un 4,7% en 2020, tras un crecimiento muy bajo del 0,8% en 2019.»
Las medidas puestas en marcha en Argelia para contener Covid-19 han tenido, según el BAfD, «graves repercusiones en los sectores de los servicios y la construcción, que han visto cómo se perdían muchos puestos de trabajo, y la disminución de los ingresos por exportación de petróleo y gas ha contribuido a aumentar aún más los déficits público y exterior». Así, según el informe, «el déficit presupuestario se duplicó con creces, pasando del 5,6% del PIB en 2019 al 13,6% en 2020, bajo la presión combinada de la caída de los ingresos por hidrocarburos, que representan una gran parte de los ingresos públicos, y el importante gasto público para mitigar las consecuencias económicas de la crisis sanitaria.»
El déficit por cuenta corriente también ha aumentado, señala el BAfD, «del 10% del PIB en 2019 al 14,8% en 2020, debido a la gran dependencia del país de las exportaciones de hidrocarburos y a las importaciones estructuralmente elevadas.» Como resultado, dice el BAfD, «las reservas de divisas han disminuido gradualmente hasta un nivel que cubre sólo 12 meses de importaciones a finales de 2020, desde los 13,6 meses a finales de 2019.»
Con el fin de proporcionar a los bancos liquidez adicional para financiar la economía, el Banco de Argelia redujo significativamente, según el informe, el coeficiente de reservas obligatorias al 3% en septiembre de 2020, desde el 12% en febrero de 2019. «En 2020, la inflación fue del 2,4%, frente al 2% de 2019. Sin embargo, si el Gobierno recurre a la financiación monetaria del déficit presupuestario, con el tiempo podría restringir el objetivo de la política monetaria de limitar los picos de inflación», recuerda además el BAfD en el capítulo sobre la evolución macroeconómica y financiera reciente.
A nivel continental, el BAfD estima en su informe anual que África debería experimentar un crecimiento económico del 3,4% en 2021, aunque considera que el impacto de la pandemia y la crisis económica que provocó han tenido implicaciones directas en los balances presupuestarios y la carga de la deuda de los países. Se espera que la relación media entre la deuda y el PIB de África aumente entre 10 y 15 puntos porcentuales a corto y medio plazo.
Fuente: El Watan.